top of page

Intimismo sobrenatural en Gräns (Ali Abbasi, 2018)


[Actualización: Gräns ganó el Premio Un Certain Regard del Festival de Cannes]

Gräns es una de esas agradecidas propuestas capaces de utilizar el cine de género para hablarnos de nosotros mismos de manera profunda y sincera, sin alardes ni efectismo. Al igual que filmes como Take Shelter (Jeff Nichols, 2011) o Under the skin (Jonathan Glazer, 2013), el realizador sueco Ali Abbasi utiliza una premisa fantástica para hablarnos de Tina, una vigilante de fronteras que desarrolla una extraña atracción por un desconocido que pondrá en cuestión toda su existencia.


La de Tina es la historia de cómo uno se encuentra a sí mismo, de cómo la vida nos reta y permite conocernos a fondo y, sobre todo, de cómo nos ayuda a ser mejores personas. Tina se enfrenta continuamente con el estigma del diferente, del extraño, del raro, del cuál es es muy difícil sustraerse porque se enquista con facilidad. ¿Qué hacer, entonces, cuando descubres a dónde perteneces realmente? Y ¿qué ocurre si ser parte de ese grupo no significa la felicidad esperada? Al final todo se reduce a uno mismo y a nuestras propias decisiones, que son lo único que puede definirnos, nunca nuestra afiliación a un clan concreto. Gräns nos enseña lo complejo que es estar en la frontera entre dos mundos (por algo su título internacional es Border) pero también representa la oportunidad de crecer, de experimentar una metamorfosis como la de Tina y dejar atrás el dolor.


La película está construida con un gran savoir-faire, apoyándose sólo lo justo en elementos fantásticos y dando las pinceladas mitológicas necesarias para comprender un relato que trasciende en seguida lo sobrenatural, hablándonos a nosotros directamente. Ali Abbasi navega con soltura el complejo mar del drama intimista a la vez que aborda el cine de género con gran fluidez, difuminando exitosamente las líneas entre ambos. Merece especial mención la actriz Eva Melander, que sostiene todo el peso de la historia, lo cual no es nada fácil si tenemos en cuenta las prótesis de maquillaje que lleva durante toda la película. Pero a pesar de tener el rostro cubierto de látex es capaz de dotar de una gran cantidad de matices a este personaje animalesco y sensible, salvaje y muy humano a fin de cuentas. Y es que la gran pregunta es siempre la misma: ¿qué queremos decir cuando decimos “humano”?

LO + LEÍDO

Vuelve pronto
Una vez que se publiquen entradas, las verás aquí.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR

bottom of page